20 noviembre, 2024
Pablo Jaramillo dejará su cargo el 30 de noviembre de este 2024 y las dudas sobre su gestión persisten en la comunidad y concejales.
Última actualización noviembre 20, 2024 a las 10:40 am
Pablo Jaramillo, agente interventor de Emdupar ESP, presentó su renuncia irrevocable al cargo, argumentando razones personales y profesionales. Aunque se mantendrá en la dirección de la empresa hasta el próximo 30 de noviembre, su salida deja más preguntas que respuestas sobre su desempeño al frente de una de las entidades más cuestionadas de Valledupar.
En su carta de renuncia, Jaramillo destacó que su decisión responde a “circunstancias personales y desafíos en el entorno laboral”, lo que generó suspicacias entre la comunidad y sectores políticos. Para muchos, la gestión de Jaramillo no logró resolver los problemas estructurales de Emdupar, como las constantes denuncias por deficiencias en la prestación del servicio de agua potable, obras inconclusas y presuntas irregularidades en la contratación.
Bajo su intervención, Emdupar continuó siendo blanco de críticas y demandas ciudadanas. A pesar de promesas de mejora, no se observaron avances significativos en la operación de la empresa, y los usuarios aún padecen cortes prolongados de agua, cobros excesivos y una red de acueducto que sigue en deterioro.
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La renuncia de Jaramillo ocurre en un contexto de constantes quejas ciudadanas por cortes prolongados de agua, tarifas desproporcionadas y el deterioro de la infraestructura de la red de acueducto. “Renuncia porque no pudo con el cargo. Nos deja con los mismos problemas de siempre y sin soluciones claras. En mi barrio seguimos igual: rebosamientos, agua contaminada y promesas incumplidas”, afirmó César Ahumada, líder comunitario del barrio 5 de enero.
Además, su salida ocurre en medio de rumores sobre presiones externas y desacuerdos internos en la entidad. Mientras algunos sectores califican su renuncia como un escape de responsabilidades, otros aseguran que Jaramillo simplemente no supo cómo lidiar con la crisis estructural de la empresa.
Desde el inicio de su intervención, las promesas de mejora quedaron en el papel. Según el concejal Jorge Luis Arzuaga, la gestión de Jaramillo no trajo avances significativos en el sistema de acueducto y alcantarillado de Valledupar. “Esa renuncia llegó muy tarde. No vimos inversión ni solución al alcantarillado sanitario, pluvial, ni a los rebosamientos de pozas. Emdupar sigue igual o peor”, criticó Arzuaga, quien desde principios de año había solicitado su dimisión por falta de un plan de acción claro.
Con esta renuncia, el futuro de Emdupar ESP queda en el limbo, y las autoridades tendrán que designar un nuevo interventor que asuma el reto de sacar a flote una empresa al borde del colapso. Por ahora, los usuarios esperan que el próximo liderazgo no sea más de lo mismo y que, de una vez por todas, se prioricen soluciones reales a los problemas históricos de la entidad. ¿Será esta renuncia un punto de quiebre o solo otro capítulo más en la crisis interminable de Emdupar?
