10 marzo, 2021
Este es otro ejemplo de cómo los países ricos priorizan los intereses de los grandes monopolios farmacéuticos sobre la vida de las personas.
Última actualización marzo 10, 2021 a las 07:59 am
A una persona cada segundo está vacunando contra el COVID-19 los países ricos, mientras que el resto de las naciones más pobres aún no han aplicado ni una sola dosis, advirtió People’s Vaccine Alliance.
“Estas mismas naciones ricas están bloqueando los esfuerzos de los países en desarrollo por los derechos de propiedad intelectual sobre las vacunas contra el COVID-19”, recalcó la alianza.
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“Deberíamos actuar ahora. No hay vuelta atrás. Es totalmente injusto que los países ricos, que tienen suficientes vacunas para proteger a sus ciudadanos, estén bloqueando la exención del ADPIC, lo que podría ayudar a los países más pobres a obtener las vacunas que necesitan”, manifestó uno de los líderes de la People’s Vaccine Alliance, Muhammad Yunus.
“Para el mundo rico, este acto propuesto de solidaridad humana para asegurar que los medicamentos y las vacunas lleguen a toda la familia humana es también en su propio interés, no solo un acto de caridad”, resaltó.
The People’s Vaccine Alliance, que agrupa a organizaciones como Oxfam International, Frontline AIDS, ONUSIDA y otras, dice que este es otro ejemplo de cómo los países ricos priorizan los intereses de los grandes monopolios farmacéuticos sobre la vida de las personas.
“Al permitir que un pequeño grupo de compañías farmacéuticas decida quién vive y quién muere, las naciones ricas están prolongando esta emergencia sanitaria mundial sin precedentes y poniendo en juego incontables vidas más”, apuntó la directora ejecutiva de Oxfam, Gabriela Bucher.
La exención propuesta al ADPIC eliminaría las barreras legales y permitiría a los fabricantes de todo el mundo comenzar a producir vacunas a gran escala en unos meses, dijo la alianza.
