Vivencias de Kaleth Morales
“Tampoco el tiempo me alcanza para entregarte mi alma que suplica diariamente tu perdón”
“Tampoco el tiempo me alcanza para entregarte mi alma que suplica diariamente tu perdón”
CRÉDITOS
Carlos Mario Jiménez Dirección y textos
Rogers Fernández Revisión de textos
Familia Morales Troya Fotografías
Un producto original de PRIMERA LÍNEA
“Todo el mundo en una cabina de grabación y la madre para el que se equivoque”, esa fue la frase que utilizó Kaleth Morales antes de grabar la canción ‘Vivo en el limbo’, en Cartagena.
El ‘Rey de la Nueva Ola’ estaba sin plata para financiar la grabación de su canción, que le hizo a su novia, María Camila Teherán, radicada en la heroica durante su época de estudiante en la Universidad del Sinú en la facultad de Medicina.
La grabación fue justamente en abril del año 2004, cinco años después de que había terminado su vida de estudiante de secundaria en Valledupar.
En una entrevista recién salía el compacto ‘La Hora de la Verdad’, Kaleth entregó detalles de cómo hizo para conseguir el producto final, que se tradujo en tener ‘Vivo en el limbo’ en un CD y entregárselo a su amigo Rafael Narváez, quien posteriormente lo hizo sonar en la radio de Cartagena.
“Vivo en el limbo nació en Cartagena, se la hice a una muchacha que hizo parte de mi vida allá en Cartagena. Cuando yo decidí grabar la canción era porque se la iba a entregar al grupo Latin Dreams, pero yo la tocaba en algunas parrandas y con amigos, muchos me decían que la grabara yo”, indicó Kaleth.
KALETH MORALES.
Para sorpresa del joven cantautor, ir a los estudios de grabación y hacer el trabajo por horas le salía muy costoso, teniendo en cuenta sus gastos de universidad y además que no contaba con el apoyo de su padre ni de amigos para financiar el proyecto.
“El día que averiguamos (con los amigos) el valor de la grabación, los precios eran muy altos y realmente para estos tiempos no había plata. Yo dije entonces que hiciéramos como grababan antes; todos en una cabina y así se hizo. Nos gastamos nada más $50.000 pesitos y listo”, manifestó Kaleth Morales, quien aseguró nunca esperó se convirtiera en éxito.
Los músicos invitados por Kaleth Morales a la grabación del que se convertiría en su cédula y éxito nacional, fueron relativamente amigos que conquistó gracias a sus canciones en Cartagena.
La producción se realizó en los estudios de Stivenson Arnedo, en Cartagena, contó Andrés Herrera, encargado de tocar el acordeón en ‘Vivo en el limbo’ y compañero de Kaleth para la época.
“El dueño del estudio hizo el detalle de dejarlo en $50.000 porque toda la base se haría en vivo. Los únicos que doblamos fue Kaleth y yo unos pases de acordeón”, manifestó Herrera.
En ese proceso, Kaleth Morales se hizo él mismo los coros y apoyos de voces. La grabación inició desde las 8:00 de la noche y terminaron a eso de las 3:00 de la madrugada.
“A las 7:00 de la mañana ya estaba sonando en la emisora. A la canción no se le hizo masterización en esa ocasión, Stivenson medio hizo una mezcla rápida y por eso es que no se escuchan algunos instrumentos. Así quedó y así gustó”, agregó el acordeonero oriundo de Villanueva, La Guajira.
“Nosotros comenzamos a tocar desde abril del 2004, en mayo se grabó ‘Vivo en el limbo’ y el último toque fue el 31 de diciembre de 2004”, puntualizó Andrés Herrera.
Los otros músicos que participaron en la grabación de ‘Vivo en limbo’ fueron:
Caja: Alex Caja
Guacharaca: Jorge Berrio
Conga: Néstor Lozano
Guitarra: Stivenson Arnedo
Bajo: Ángel Orozco
Timbal: Guido González
Batería: Yair Payares
Segunda voz: Óscar Rodríguez
El acordeonero Juank Ricardo, quien acompañó a Kaleth Morales durante su exitosa carrera, explicó cómo se dio dicha entrevista en Bogotá, el 23 de abril de 2005.
“Es una de nuestras entrevistas más famosas y fue muy especial. Estábamos en Bogotá, tocamos en vivo todo el programa y, en plena entrevista, con complicidad del presentador José Manuel Eugenio del Gordo, le cantamos el cumpleaños a Keyner, el hermano de Kaleth; fue un momento muy bonito entre los dos hermanos. Otro recuerdo que quiero destacar, es que ese día me tocó hacer la entrevista con un acordeón prestado. Resulta que en esos días yo perdí mis acordeones en un percance, que a decir verdad, no es mi mejor recuerdo. Kaleth y yo estuvimos en peligro, pero, afortunadamente salimos ilesos. Pues bien, un buen amigo y colega, Efraín Zuleta, el hijo menor del Viejo Emiliano, me prestó su acordeón, que estaba marcada con su nombre. Ese mismo día tocamos un concierto en la capital del país y el miércoles 27 en Cali. Llegamos a Barranquilla al día siguiente y de ahí nos recogió el bus de la banda para ir a Valledupar, que estaba en tiempos de Festival Vallenato. Aquí, en mi tierra natal, realizamos un concierto inolvidable que quedó, estoy seguro, en la retina de todos a los que les gusta el vallenato y, en especial, la música de Kaleth”, declaró Juank Ricardo.
Y aunque era algo extraño, pero muy llamativo, Silvestre Dangond era el gran ídolo de Kaleth Morales. Un día pensaron que cantarían juntos en Valledupar, pero algo inesperado pasó y solo quedó la promesa. Por eso te invitamos a LEER AQUÍ la historia.
