22 julio, 2024
Todas las encuestas apuntan a que la posición de Venezuela será la ganadora de las elecciones, pero ¿Maduro aceptará?
Última actualización julio 22, 2024 a las 03:33 pm
Un grupo de expertos ha analizado el complejo panorama electoral en Venezuela y ha planteado dos escenarios principales: la posibilidad de una negociación que conduzca a una transición democrática y ponga fin a 25 años de chavismo, o la eventualidad de que el gobierno, considerado perdedor por la mayoría de las encuestas independientes, se atrinchere en el poder.
El pasado 17 de julio, el presidente Nicolás Maduro lanzó una advertencia contundente: “El destino de Venezuela, en el siglo XXI, depende de nuestra victoria el 28 de julio. Si no quieren que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fratricida, producto de los fascistas, garanticemos el más grande éxito, la más grande victoria de la historia electoral de nuestro pueblo”.
El primer escenario se asocia principalmente con la enorme popularidad de la líder opositora María Corina Machado, cuyos mítines atraen multitudes en todo el país. Aunque la justicia venezolana le prohibió participar en las elecciones, ha transferido prácticamente todo su capital político al diplomático Edmundo González, quien inicialmente rechazó ser candidato pero finalmente aceptó.
Según un estudio publicado el 28 de abril por la firma Datincorp, en unas elecciones en las que participen todos los candidatos –inicialmente 13, de los cuales tres renunciaron–, González obtendría el 50,25 por ciento de los votos, mientras que Maduro recibiría el 18 por ciento. En un escenario de enfrentamiento directo, el representante de la oposición unida bajo la Mesa de la Unidad Democrática ganaría con el 62 por ciento de los votos frente al 20 por ciento del candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela.
TE INTERESARÍA LEER: Colombia, recibe el premio al juego limpio en la Copa América
La poderosa influencia de María Corina Machado, celebrada por la diáspora de 7,7 millones de venezolanos que han emigrado debido a la crisis económica que afecta al país desde hace una década, podría obligar al gobierno a reconsiderar sus estrategias. En este contexto, «el gobierno buscará asegurarse de que la persona que tome el mando sea de confianza», según indicó un analista. Añadió: «Lo que han dejado claro es que nunca cederán el poder a María Corina Machado».
El principal interrogante en este escenario es por qué el gobierno de Nicolás Maduro, que ha mantenido el poder desde 2013 tras la muerte de Hugo Chávez y fue reelegido en 2018 sin la participación de la oposición, cedería ahora. Especialmente cuando Machado ha sugerido que, si González gana, será ella quien gobierne.
Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, predice que «independientemente del resultado político del 28 de julio, habrá una nueva ola de emigración venezolana» para la cual los países de la región no están preparados. Esto ocurre en un momento en que Panamá ha decidido cerrar varios pasos migratorios a través de la jungla del Darién, que conecta Sudamérica con Centroamérica.
«Si el régimen gana, se vivirán otros seis años de lo mismo, pero con alta inestabilidad política. Si la oposición gana, enfrentará casi ocho meses de transición sin controlar completamente el Estado venezolano», agregó Rodríguez.
TE INTERESARÍA LEER: Lo último: María Corina Machado denuncia atentado en su contra
Este nuevo éxodo estaría compuesto principalmente por adolescentes preocupados por sus derechos a la educación y la salud en un país donde el salario mínimo es de aproximadamente 3,5 dólares mensuales (con bonos que pueden alcanzar los 130 dólares) y la canasta básica supera los 554 dólares.
Ante esta situación, Washington habría decidido retomar las negociaciones con Caracas debido «a la urgente necesidad de reanudar las deportaciones de ciudadanos venezolanos». Esto representa una medida de mano dura necesaria en el contexto de las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos, donde la migración es un tema central. Rodríguez señaló que el gobierno de Maduro «busca que Estados Unidos legitime el proceso electoral del 28 de julio, independientemente de su transparencia». Por lo tanto, todas las opciones siguen sobre la mesa.