4 junio, 2024
Familias buscan justicia tras desplome mortal. Fuertes lluvias y vientos desencadenan colapso que cobra la vida de dos personas.
Última actualización junio 6, 2024 a las 10:52 am
El desplome parcial de una estructura en una casa de campo ubicada a las afueras de Valledupar ha dejado un saldo trágico, aumentando la incertidumbre y el dolor entre las familias de las víctimas. El incidente, ocurrido el pasado sábado en medio de una fiesta de bodas, resultó en la muerte de Naileth Guerra, de 22 años, y Saray Manga, una menor de 13 años oriunda de Barranquilla. Ahora, las familias afectadas buscan justicia y respuestas sobre lo sucedido.
A las 8:10 de la noche, en plena celebración, la estructura de la casa de campo colapsó sobre más de 80 personas presentes, incluyendo a los novios, familiares, invitados, músicos y empleados. La escena se transformó rápidamente en un caos de desesperación y miedo mientras los asistentes intentaban escapar del peligro sin comprender del todo lo que había ocurrido.
El desplome, aparentemente causado por fuertes lluvias y vientos, dejó un panorama desolador. El Cuerpo de Bomberos, Defensa Civil, Cruz Roja y la Alcaldía de Valledupar respondieron de inmediato a la emergencia, trabajando arduamente durante más de cuatro horas para rescatar a las víctimas atrapadas entre los escombros. Las ambulancias se multiplicaron para trasladar a los heridos a diferentes centros médicos de la ciudad. Lamentablemente, en uno de estos centros se confirmó el deceso de Naileth Guerra.
Ronald Castillejo, uno de los testigos, describió a Primera Línea los momentos agónicos vividos durante y después del desplome. “El techo se vino abajo en cuestión de segundos”, relató, Además señaló la presencia de notables goteras en el techo antes del colapso, sugiriendo que la estructura ya presentaba problemas previos.
Víctor Guerra, padre de Naileth Guerra, ha confirmado que presentó una denuncia penal, esperando que las autoridades realicen una investigación exhaustiva y apliquen las sanciones correspondientes. “Esperamos que las autoridades nos den las respuestas que estamos exigiendo, porque en mi cabeza como padre de Naileth, y ante las autoridades competentes, establecí una denuncia formal porque sí, la consideramos como una muerte violenta”, declaró Guerra.
El alcalde de Valledupar, Ernesto Orozco, informó que un equipo de peritos está investigando si el lugar cumplía con los protocolos de seguridad necesarios para este tipo de eventos. “Hay que revisar el reglamento de propiedad horizontal y de convivencia, los reglamentos de estos condominios, porque las personas creen que por ser propietarias de sus casas campos, de sus lotes, pueden construir y hacer lo que quieran allá”, afirmó Orozco.
El desplome dejó más de 30 heridos, de los cuales aproximadamente 19 fueron dados de alta durante el fin de semana. Sin embargo, 11 personas continúan hospitalizadas, cuatro de ellas en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). Entre los heridos más graves, tres mujeres en la clínica Laura Daniela tuvieron que ser sometidas a intervenciones quirúrgicas por lesiones en las extremidades. Otros heridos se encuentran en la clínica Médicos, Hospital Rosario Pumarejo de López, y clínica Santa Isabel, con traumas que requirieron atención ortopédica. En la clínica Alta Complejidad, un hombre sufrió la amputación de una pierna debido a los múltiples traumas.
La comunidad y las familias de las víctimas claman por respuestas y justicia, señalando que esta tragedia, a su parecer, era evitable. La administración municipal se enfrenta ahora a la presión de realizar una investigación transparente y exhaustiva para determinar las causas del colapso y asegurar que se tomen medidas para evitar futuras tragedias. La búsqueda de justicia se ha convertido en una prioridad para las familias de Naileth Guerra y Saray Manga, quienes no descansarán hasta que se esclarezcan las responsabilidades por las vidas perdidas en este trágico evento.