20 septiembre, 2022
La historia de la familia Díaz Duarte toma un giro inesperado con el nacimiento de Leandro. Su padre no soporta tener un hijo ciego.
Última actualización septiembre 20, 2022 a las 10:35 pm
Leandro Díaz es chiflado en la plaza de Fundación, todo porque Arturo, su hermano, lo pone a cantar la canción ‘La loba ceniza’, que todos creen es de Abel Antonio Villa.
El compositor terminó en la cárcel al golpear un policía y Chico Bolaños se encarga de rescatarlo, mientras Matilde Lina lo espera en la estación del tren con ganas de irse a Santa Marta.
Al descubrir la ceguera de Leandro, Onofre se echa a tomar licor, parrandera y hasta llega a desear la muerte. Pero es José Luis Díaz, padre de Nacha, quien bautiza al pequeño que llaman Leandro José Díaz Duarte.
TE INTERESARÍA LEER: Leandro Díaz pierde la ‘guerra’ por el rating en su capítulo de estreno
Todo eso sucede en Los Pajales, una finca cerca de Hatonuevo, La Guajira. Hasta la casa de los Duarte Díaz volvió Onofre, quien se sorprendió al saber sobre el nombre que en honor a un santo le puso su madre.
Nacha es obligada por Onofre a tener relaciones sexuales porque solo quiere un hijo con todos los sentidos completos. “Dios, como me mandes otro hijo defectuoso hasta aquí llegamos. Perdón mi Dios, pero lo único que quiero es dejar un hijo sano”, narra Onofre, quien celebra la llegada de Arturo, hermano menor de Leandro.
Leandro crece, alejado de su hermano y despreciado por su padre Onofre. Su abuelo José Luis le regala una guacharaca para sembrar la semilla de la música en el nieto ciego.
Un acordeón llega a las manos de Leandro, así tiene su primer contacto con el instrumento de viento. Le pide a su abuelo enseñarle a hacer una canción y quiere hacer muchas cosas más de la casa.
TE INTERESARÍA LEER: Elenco y personajes de la novela Leandro Díaz que interpreta Silvestre Dangond
‘Historia de un niño’ aparece. La inspiración profunda de Leandro para resaltar su niñez y momentos cruciales desde que nació. Hatonuevo es el primer destino que desea conocer el menor.
Hando es el seudónimo a Leandro. Así lo llama su mamá Nacha y su hermano Arturo, quien siente deseo de quererlo, pero Onofre no lo permite. El odio crece entre los hermanos, todo acolitado por su padre.
En cuanto pone un pie en la finca, Erótida hace conexión con su sobrino Leandro y se convierte en su protectora, en especial cuando se da cuenta de cómo lo rechaza su hermano Onofre y del silencio de su cuñada Nacha ante tal situación.