4 septiembre, 2019
El Bosque para la Paz consistió en un acto mediante el cual se plantaron más de 30 especies nativas como carreto, corazón fino, roble, aceituno y mango.
Última actualización septiembre 4, 2019 a las 08:14 pm
En el marco de la Semana por la Paz, que promueven la Oficina Asesora de Paz Departamental y la Pastoral Social de Valledupar, a la Universidad Popular del Cesar, UPC, se trasladaron dos acciones representadas en la creación de un bosque y la declaratoria de territorio de paz.
“Debemos recordar que la universidad en esa época tan dolorosa fue víctima de la guerra y hoy es sujeto de reparación colectiva. Eso nos llevó a las entidades organizadoras de la Semana por la Paz a declararla Territorio de Paz, porque fueron muchos los amigos que perdimos en la guerra entre profesores y estudiantes. Aquí los recordamos con el mural de sus rostros y con esta declaratoria”, explicó Jesualdo Hernández Mieles, asesor de Paz del Cesar.
Ambas iniciativas han sido de una alta importancia para la comunidad académica, líderes sociales y representantes de las instituciones, “en el marco de esta celebración hemos venido trabajando en acciones que contribuyan a una paz estable y duradera y en ese enfoque decidimos declarar en el país 1.000 territorios de paz, desde espacios pequeños como una oficina hasta espacios extensos como lo es nuestra Universidad Popular del Cesar; y la importancia es que hacemos esta declaratoria no desde la victimización, sino desde la resiliencia que ha tenido este centro de pensamiento para seguir avanzando en la educación de nuestros jóvenes”, indicó Guillermo Pérez, líder social.
El Bosque para la Paz consistió en un acto mediante el cual se plantaron más de 30 especies nativas como carreto, corazón fino, roble, aceituno y mango, en calles adyacentes al alma mater, esfuerzo que contó con el apoyo de la Fundación Biosierra.
“Estas son herramientas importantísimas para la cohesión de las personas que de una u otra forma han estado aislados de la sociedad; la violencia se vive de muchas maneras, no solamente desde el ámbito de las armas, somos seres de guerra naturales y me parece que estas acciones son tal vez el mayor contenido social que le podemos entregar a la sociedad y nos merecemos todos la paz”, explicó Miguel Ángel Sierra.
Para el sacerdote Jesús Torres, director de la Pastoral Social de Valledupar, iniciar la siembra de árboles para la formación del Bosque para la Paz es semejante a la construcción de la propia paz de Colombia.
Para Armando Sanabria estudiante de sociología quien participó activamente de la siembra del Bosque por la Paz, la jornada resultó muy provechosa, “me parece que impacta de una manera positiva, debido a que en lo que corresponde al medio ambiente también ha resultado afectado por la guerra que ha surgido en el país durante 50 años, y es bueno ver que se esté contemplando la cultura verde y es bueno ver que también puede haber una afectación positiva por medio de estas actividades que se están desarrollando”, puntualizó el joven académico.