24 mayo, 2024
Los amigos despidieron a Omar Geles durante un gran recorrido por la zona centro y norte de Valledupar. Así es nuestro resumen en el último adiós al rey vallenato.
Última actualización mayo 24, 2024 a las 02:12 pm
Valledupar se vistió de blanco y negro para despedir a Omar Geles, el genio de la música vallenata que adornó su carrera con un sinfín de éxitos, plasmando en ellos las experiencias de su vida. La vida de Omar no fue fácil, luchó contra las dificultades, el abandono de su padre a temprana edad lo obligó a convertirse en el hombre de la familia, tratando de llevar sus primeros centavitos al seno del hogar liderado por Hilda Suárez.
El acordeón fue su mejor amigo, al que conoció de manera inesperada cuando su hermano Juancho Geles lo despreció, mientras él lo abrazó y creció el vallenato en su alma. A los tres años ya lograba palpar la herramienta que lo llevaría a convertirse en el genio musical. Decía Geles que a esa edad ya lograba interpretar ‘Lucero espiritual’ obra de Juancho Polo Valencia y que ahí descubrió su talento para la música.
Despedida del rey
Valledupar le entregó a Omar un poquito de lo que él les brindó en sus canciones, en la tarima ‘Francisco el Hombre’ de la plaza Alfonso López, donde se coronó rey vallenato 1989, lo despidieron como un grande, homenajeado por sus colegas y acompañado de un público triste por su partida. Geles estuvo dos días en cámara ardiente mientras recibía el cariño de su pueblo.
Omar Geles le entregó al vallenato más de 1.000 canciones grabadas, entre ellas éxitos como ‘A blanco y negro’, ‘La falla fue tuya’, ‘Historia’ y muchas más; en la gaveta de composiciones quedaron otras 1.000 garantizando que su influencia perdure.
Un talento adelantado a su tiempo
Omar Geles fue un innovador del vallenato, un artista que rompió moldes y desafió convenciones. Su capacidad para reinventarse y adaptarse a las distintas épocas lo convirtió en un pionero en un mundo que a menudo carecía de originalidad. Un ejemplo claro de su audacia fue su disco ‘El Vallenaton’, una fusión entre vallenato y reguetón, que lo catapultó al reconocimiento internacional con el éxito ‘Chao amor’.
Su habilidad para fusionar géneros y explorar nuevos sonidos no solo revitalizó el vallenato, sino que también le permitió llegar a una audiencia más diversa y global. Tanto así que también compuso salsa, en la canción ‘Renuncio’, escrita para la orquesta venezolana Proyecto A, donde nos enseñó su versatilidad para la creación de fusiones musicales.
Por Sebastián Ramírez.
