Por: Jorge Rosado


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Conclusiones de reunión convocada por la Iglesia católica donde estuvieron Gustavo Petro y Efrain Cepeda

17 junio, 2025

Según Eljach, la jornada permitió una reflexión profunda sobre la situación actual de Colombia.

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Última actualización junio 17, 2025 a las 11:49 am

En medio de una grave polarización política en Colombia, la Iglesia católica volvió a asumir un rol de mediadora al lograr reunir en una mesa al presidente Gustavo Petro, al presidente del Senado Efraín Cepeda, líderes de organismos de control y presidentes de las Altas Cortes. La reunión fue convocada por el cardenal Luis José Rueda, tras el atentado contra el precandidato Miguel Uribe Turbay y un día después de la multitudinaria Marcha del Silencio, donde sectores de oposición responsabilizaron a Petro de fomentar una atmósfera violenta con su discurso confrontacional.

La tensión ha escalado por el decreto presidencial que convoca una consulta popular sin el aval del Senado, lo que ha sido cuestionado por múltiples sectores, incluidas voces del mismo espectro progresista. Actualmente, el decreto está siendo evaluado tanto por el Consejo de Estado como por la Corte Constitucional, lo que pone a estas instituciones en el centro del conflicto. Aunque el mandatario insiste en que la Corte debe decidir, muchos juristas consideran que el Consejo de Estado tiene la competencia para suspender la medida de forma preventiva.

Llamado al diálogo y respeto institucional en encuentro nacional por la reconciliación

El procurador Gregorio Eljach calificó como positivo el mensaje central del encuentro, destacando que “desarmar la palabra”, como lo señala la declaración final, brinda tranquilidad y sosiego en un momento clave para el país.

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Según Eljach, la jornada permitió una reflexión profunda sobre la situación actual de Colombia y subrayó la urgencia de fomentar espacios de diálogo que conduzcan a consensos.

Por su parte, el senador Iván Cepeda, uno de los asistentes, precisó que su participación no implicaba asumir compromisos específicos, pero sí representaba un gesto claro de respaldo al propósito de propiciar un lenguaje armonioso y constructivo. Cepeda insistió en la importancia de respetar las decisiones y la autonomía de los poderes públicos, fundamentos esenciales del sistema democrático.

A su turno, monseñor Francisco Múnera recalcó que cada institución tiene un rol claro dentro del marco constitucional. “Existe una voluntad común de respeto mutuo y de trabajar por el fortalecimiento de la institucionalidad. Todos estamos al servicio de la Carta Magna”, afirmó.