20 agosto, 2019
9 de cada 10 exámenes por posible abuso sexual son para menores de edad, según de Medicina Legal
Última actualización agosto 20, 2019 a las 09:23 am
Las reformas constitucionales y referendos necesarios para establecer esta pena se vienen proponiendo desde hace 12 años con resultados poco alentadores cada vez que es discutida por los congresistas.
Una de las razones es la poca fe que han tenido los legisladores sobre el impacto preventivo que tendrá esta medida en la sociedad.
La discusión del trámite se inicia en la Cámara de Representantes este martes y cuenta con el respaldo de sectores de Cambio Radical, el Partido Conservador y el Centro Democrático.
El debate se centrará no solo en busca proteger a niños, niñas y adolescentes contra la violencia sexual, sino contra también contra el homicidio.
“La propuesta se sustenta en los convenios que el país ha firmado, como el Convenio sobre los derechos del niño, la Convención americana de los derechos, la declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos del Niño. Los niños tienen un carácter especial y prevalente y así está en nuestra Constitución”, aseguró el representante a la Cámara César Lorduy, de Cambio Radical, uno de los autores del proyecto de ley.
El congresista afirma que la importancia de establecer la cadena perpetua a los violadores de niño está en disminuir la cifras, que según Medicina Legal, 9 e cada 10 exámenes por posible violencia sexual fueron a menores de edad.
En la teoría toda Colombia estaría de acuerdo con implementar una pena más dura contra los violadores de niños y niñas, sin embargo, desde el Polo Democrático liderados por el Germán Navas Talero, y de la Farc, liderados por Luis Albán, están preparados para no dar avance a las reformas que plantea la iniciativa parlamentaria.
Para los congresistas, ya existen condenas lo suficientemente altas para dar castigo a los delincuentes que abusan y atenten contra menores de edad.
La oposicionistas a estas reformas catalogan la reformas como «populismo punitivo» y advierten de posibles consecuencias negativas al servicio carcelario de ser aprobadas, tales como hacinamiento, entre otras.
“Estas medidas suelen ser bastante populares a nivel de la opinión pública y dan buenos réditos políticos a quienes las defienden, pero no sólo tienen una eficacia limitada y discutible para prevenir los crímenes, sino que pueden agravar muchos de los problemas del sistema penal, como el hacinamiento carcelario de la cadena perpetua. Pero un odio generalizado, por más explicable que sea, no constituye una razón”, aseveran los representantes.
La discusión es la primera en el orden del día.